Al dueño de Ryanair no se le puede criticar por su ausencia de originalidad a la hora de rentabilizar sus aviones, sin duda tiene las ideas más sorprendentes para sacar el máximo beneficio a sus vuelos, sin embargo, el hecho de que tenga ideas originales no quiere decir que sean siempre las más adecuadas o las que más concuerdan con las ideas de la normativa de la UE.
Después de sorprender y asustar con aquellas declaraciones en las que pretendía que sus viajeros fueran de pie, su última estrategia quiere ir mucho más alla: reducir los baños y además «vender» el uso de estos, de esta forma, por un lado pretende reducir el tráfico en el pasillo del avión durante el vuelo, por otro lado, aumentarían hasta en seis los asientos para pasajeros, y por último, se rentabilizaría en uso de los baños.
Aunque la la UE no le ha gustado nada la idea, O’Leary, director de la compañía aeréa irlandesa, se ha defendido asegurando que es muy raro que los cuatro baños que actualmente tienen sus aviones, se usen a la vez, por lo tanto, pretende reducir a uno solo, los baños que habrá en cada avión. La otra idea de la compañía pasa por instalar en los aseos puertas como las que ya hay en muchas estaciones de autobuses y trenes, es decir, que se abren introduciendo una moneda.
Sin duda dos ideas de marketing que, de momento, ya han levantado ampollas en Europa, pero que seguro que entusiasman a los amantes de viajar barato y a los asiduos de la compañía Ryanair.
Puede que las nuevas iniciativas de ahorro se queden, como ya ha pasado en más de una ocasión, en meras palabras, pero no se puede negar, en ningún caso, que Ryanair es la empresa número uno en crear campañas que llaman la atención de prensa, organismos gubernamentales y público en general.
¿Montarías en un avión que tuviera los aseos de pago?
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