Susana. Este es el nombre de la concursante que ha pasado ya a formar parte de la historia de Gran Hermano al proclamarse ayer ganadora de la edición 14, dejando en el camino a Igor, Desi y Raky, que tuvieron que conformarse con la segunda, tercera y cuarta posición respectivamente.
Un 53% de la audiencia fue la que consideró que la joven murciana era la merecedora este año del maletín de los 300.000 euros. Su saber estar, el haber actuado de una forma coherente, el ser sincera sin caer en la vulgaridad, el haber sido divertida y capaz de convivir sin problemas de gravedad o el haber disfrutado desde el primer minuto de programa, llegando incluso a conocer el amor, parece ser que podrían ser las razones que la han llevado a obtener el primer puesto.
En segundo lugar, como mencionamos, quedó Igor que esa noche se veía más ganador que nunca y de ello quedó constancia en su cara cuando escuchó el nombre del vencedor. Pero eso no le impidió seguir tan “encantado de conocerse”, como él mismo ha afirmado, incluso cuando a su entrada a las instalaciones de Telecinco era abucheado por gran parte del público que allí se encontraba.
La tercera posición, por su parte, fue para Desi que no pudo reprimir su gesto contrariado ante tal clasificación pero que finalmente logró una sonrisa cuando supo que su enemigo, Igor, no conseguía el triunfo. Una enemistad que, sin duda alguna, sentirá aquella más que nunca después de ver un vídeo en el que el vasco no sólo se burlaba de su travestismo sino que además proponía, junto a otros compañeros, el hacerle una fotografía de sus genitales mientras se duchaba. Lamentable, como siempre, este señor.
Finalmente la cuarta posición recayó en Raky, que volvió a verse las caras en plató con su novio y que reconoció abiertamente que, aunque dentro del programa en algún momento había tonteado con Juan Carlos, seguía enamorada de su chico.
El resto de la gala fueron continuas anécdotas:
- La marcha del plató de Sonia después de que Mercedes Milá la llamara “cara de vinagre”.
- Los, como siempre, “exaltados” gemelos Montoya que no pararon de saltar al saber que Susana era la ganadora.
- La pesada actitud de Iván afirmando que Danny debería haber estado en plató.
- La presencia de Argi en plató por primera vez, después de haber sido expulsada de Gran Hermano. En este punto, y aludiendo al comentario de la presentadora de que Danny no se merecía estar en la gala por haber sido expulsado, considero que la vasca tampoco se lo merecía y más cuando se le echó por un comentario sobre ETA que ha causado tanto daño en nuestro país.
