Una de las dolencias que suele molestar bastante a los niños, y a los padres porque piensan que no lo han hecho bien, es la aparición de lombrices, un problema que no es grave pero que sí es bastante molesto y puede hacer que los demás miembros de la familia se contagien o que no descansen bien.
Existen algunos remedios, fármacos y medicamentos que pueden ayudarte a tratarlos pero también, de forma natural, hay algunos remedios que te pueden ayudar y son menos invasivos que los medicamentos. Así, tienes los siguientes:
– Semillas de calabaza, sobre todo por la mañana en ayunas. Tomando unas cuantas, eso sí, machacadas en el mortero y mezcladas con yogur o con papilla, puede ser mucho más fácil de pasarlas.
– Semillas de limón. Son muy fáciles de consumir, tienes que coger 10-12 cada día y hervirlas en una taza de leche. Cunado rompa a hervir cuela el líquido y échale una cucharada de miel. Es uno de los mejores tratamientos que hay y se toma en ayunas 3-4 días.
– Infusión de ajenjo. Tienes que mezclar una cucharada de ajenjo con un litro de agua. Hazla como un té para dejarlo reposar 10 minutos y endulzarlo con azúcar (si no es la blanca mejor). Se debe tomar 3 veces al día, medio vaso. Es de lo que mejor elimina las lombrices.