La vuelta de vacaciones está cada vez más cerca y, aunque sabemos que no es de lo que te gustaría que hablásemos, como madres y padres has de empezar a ponerte encima de los niños porque ellos son a los que más les va a costar el cambio de no hacer nada a tener que controlarse, abrir libros, hacer deberes y sobre todo tener que respetar un horario y unas normas que les impiden hacer lo que ellos quieran.
Por eso es que, unos días antes, deberías empezar a cambiar la rutina de los niños:
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Trata de que se levanten antes, así a la hora de madrugar no te darán tantos problemas.
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Ponles un par de horas de ejercicios de repaso para recordar lo que dieron el año pasado. Esto puede ser muy conflictivo porque los niños no van a querer o no harán nada en esas horas por lo que tendrás que estar encima (sí, sabemos que al final una acaba cabreada con ellos y lo mandas todo a la porra pero persevera y obtendrás tu recompensa).
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Dales premios, que no quiere decir que siempre sean juguetes o regalos, cada vez que sean ellos los que se pongan a leer, a estudiar un poco.
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Empieza a hablarles del nuevo curso, de lo que harán, las ventajas de ser un año mayor y las actividades a las que lo apuntarás, en caso de que lo hagas. Se trata de hacerle tentador lo que le espera y no verlo como un aburrimiento de no poder jugar a lo que quiere o hacer otras cosas que a él o ella le gustan.