El Pirineo Aragonés, engloban distintos atractivos como altas montañas, valle, estaciones de esquí y parques naturales. Una zona impresionante con abruptos paisajes, para practicar actividades deportivas de riesgos, gastronomía repleta de tradicionales y monumentos en sus valles.
Entre sus múltiples atractivos podemos enumerar lugares como la Comarca de la Jacetania, con sus pistas de esquís, localidades pequeñas con mucho encanto, los Valles de Aragón y de Tena, con Benasque, la Ribagorza, el Parque natural de la Sierra y los Cañones de Guara, el Parque nacional de Ordesa y Monte Perdido y el Parque natural de los Valles occidentales.
El Pirineo Aragonés, puede presumir de tener estaciones de esquí inmejorables, por la que cada temporada pasan cientos de usuarios. Unas estaciones que cada temporada se renuevan con pistas nuevas, actividades y servicios para disfrutar toda la familia.
Se distribuye en el Valle de Aragón, con Astún y Candanchú, el Valle de Tena, con Panticosa y Formigal, y algo más apartado el Valle de Biescas, con Cerler en la cota más elevada. Los dos primeros agrupan un amplio número de visitantes, por su fácil acceso como por la excelencia de contar de cuatro estaciones de primer nivel muy próximas entre sí, ya que están solamente separadas por cuarenta kilómetros. Por su lado, Cerler es un paraje excepcional para practicar en invierno el esquí y otras actividades durante todo el año.
Candanchú, es la estación española de esquí más antigua del país. Está situada justo al lado de la de Astún y a solamente un kilómetro del Puerto de Somport, dirección Francia, es una estación de ambiente familiar, tiene un gran número de pistas para los que quieran iniciarse en el esquí. Sus atractivos turísticos y alojamientos, la convierten en un destino perfecto también para pasar el verano.
