El Museo del Greco en Toledo está situado en la Paseo del Transito sin número. En su interior guarda parte de la obra de este gran pintor, de la que destacan varias obras como Las lágrimas de San Pedro, Vista y plano de Toledo. Se complementa con obras de otros artistas como Murillo, Valdés Leal, Luis Tristán, etc.
La construcción fue levantada a comienzos del siglo XX, aprovechando un palacio renacentista y un edificio del siglo XVI para unir en un solo espacio, la obra repartida del pintor. Quien compro estas construcciones fue el Marqués de la Vega – Inclán, y los completó con enseres y mobiliario del siglo XVI. Fue inaugurado en el año 1912.
El edificio es rodeado por una galería con una azotea, en el piso centro sobre columnas jónicas de piedra. Cuenta con un par de portadas renacentistas que dan entrada al edificio, y que son de mampostería, piedra y ladrillo.
Permaneció cerrado por un tiempo, mientras duraron las obras de adecuación. En 2003 se desarrollo un proyecto de exposición, incluido en un plan de renovación general del museo.
Con la remodelación se ha creado también nuevos espacios públicos como el centro de acogida, la rehabilitación de las cuevas y el jardín histórico. También, se han incluido nuevos sistemas para permitir la mejor entrada a los visitantes, especialmente a las personas con audición o movilidad reducida.
Para esta etapa nueva, el Museo del Greco, ha desarrollado un nuevo lenguaje gráfico y visual, que programa nuevos valores y propiedades. Transmitiéndose la idea de un renovado museo, en el que es importante la comunicación con los visitantes.
¿Por qué te gustaría visitar el Museo del Greco en Toledo?
