Uno de los problemas de piel que puede sufrir tu hijo y que, en principio, no tienes que hacer nada ni tampoco están relacionadas, como mucha gente cree, con el síndrome de Down, son las manchas mongólicas, algo que puede tener tu hijo y que son zonas de la piel que están de color negro azulado, sobre todo en la parte lumbar y en las nalgas.
Se distinguen de otro tipo de manchas en el hecho de que éstas son grandes, planas y difusas que se producen por las células que se encargan del pigmento siendo más frecuentes en bebés de piel morena y oscura que en los rubios.
Lo más normal es que las manchas se noten mucho al principio pero después, conforme va creciendo, estas manchas se van haciendo más pequeñas y desapareciendo sin que se haga nada, de hecho los médicos no suelen prestarle mucha atención.
El problema de estas manchas y de su nombre es que muchas piensan que puede ser algo malo pero nada más lejos de la verdad, lo cierto es que son manchas como las pecas, con la salvedad de que estas, en la mayoría de los casos, llegan a eliminarse por completo del cuerpo en cuanto las células encargadas de pigmentar funcionan correctamente y se adaptan al entorno.