Muchas veces te puedes mirar en el espejo y pensar que no eres lo bastante delgada, o que no eres guapa, o que no eres lo suficientemente alta. Pero, ¿realmente te das cuenta de lo bueno que tienes? Porque sí, ser bajita también puede tener muchos beneficios y saberlos hará que tu autoestima crezca.
De hecho, muchas veces es simplemente lo que la sociedad dice lo que nos condiciona para lograr ser felices cuando, en realidad, lo importante es que una se sienta bien. Y para ello no hay que tomar en consideración lo de los demás, sino lo que a una le haga feliz.
Ser bajita no tiene que ser algo malo, al contrario, tiene muchas ventajas como por ejemplo:
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No tendrás problema de que los pantalones se te queden cortos, ni siquiera cuando los laves mucho y encojan porque los pantalones te vendrán mucho mejor.
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Puedes ponerte tacones y tener diferentes alturas, de tal forma que juegas un poco con tu vestuario y cambiarás de look siempre.
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No tendrás tantos problemas de dolores de espalda porque tu cuerpo está más equilibrado.
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No tendrás problemas con las puertas o con golpes en la cabeza por ser demasiado alta.
Por supuesto, ser bajita también tiene muchos problemas de autoestima debido a que la sociedad critica a las personas que son diferentes. Los insultos, las vejaciones y otros problemas pueden afectar psicológicamente a las personas y es por eso que hay que evitar hacer sentir mal a otros solo porque sean diferentes.