Cualquiera que haga una dieta, sabe que los hidratos de carbono son una fuente de calorías… Así que las patatas son uno de los enemigos acérrimos de quien quiere perder peso, en todas sus versiones, pero sobre todo, cuando están fritas, porque además de hidratos de carbono contienen grasas. Pero, ahora un curioso estudio revela que las patatas no son tan nocivas dentro de una dieta variada, incluso cuanto esta tiene por objetivo adelgazar.
Las patatas no engordan
La Universidad de Stranton de Pensilvania ha presentado sus conclusiones sobre el consumo regular de patatas y desde luego, contienen interesantes informaciones sobre las características de estos tubérculos.
Una de las más interesantes es que las patatas ayudan en la reducción de los niveles de triglicéridos y en la mejora de la presión arterial, dos aspectos esenciales para mejorar la calidad de vida y reducir las posibilidades de contraer enfermedades cardíacas, o incluso de prevenirlas.
Pero, quizás, las revelaciones las curiosas se refieren a la relación entre las patatas y el exceso de peso. Según el informe, comer patatas no favorece en incremento de peso, es más, incluye algunos componentes que regulan las calorías que se consumen y que hacen que, aunque se incremente la cantidad de alimentos que se ingieren, ello no influya en el peso.
Eso sí, no siempre las patatas tienen en mismo efecto y, de nuevo, las variedades fritas se mantienen como uno de los «prohibidos» de las dietas de control de peso y de colesterol, pero consumirlas asadas al horno y, sobre todo, al microondas puede ser un buen aliado de la dieta.