Tras el anuncio de las modificaciones en las Políticas de Privacidad y los derechos de los usuarios, a la red social con forma de app para compartir fotografías, Instragram, no le ha quedado más remedio que recular debido a la presión y el enfado de los usuarios ante la posibilidad de que se comercializara con sus fotografías.
Los enfados e indignaciones eran de esperar. Y es que las modificaciones de Instagram en su Política de Privacidad, que además se especificaban en inglés y sin posibilidad de traducción y un texto extenso; contenían un punto en el que, de ser aceptadas por los usuarios, le concedía el derecho a Instragarm de utilizar sus fotografías en anuncios publicitarios con fines comerciales.
Concretamente, traducid al castellano, lo que decía el punto al que nos referimos es: «estás conforme con que Instagram u otra entidad que nos pague por usar tu nombre de usuario, gustos, fotografías u otros metadatos asociados y otras acciones que realices, en conexión con promociones o contenidos de pago o esponsorizados, sin ninguna compensación para ti«.
Tras la polémica y el enfado lógico de los usuarios de la red social, Instagram, a través de su blog oficial ha anunciado que no comercializará con las fotografías de los usuarios, que ha sido un error en la redacción de las modificaciones de la Política de Privacidad. Y como rectificar es de sabios, Instagram, corregirá este punto.
