Aunque ahora mismo la temperatura por el día no parece ser la normal para la época otoñal que debería haber, lo que sí es cierto es que el invierno va a llegar y eso hará que muchos sean más reacios a salir a la calle a hacer ejercicio. Pero si ya tienes una rutina saliendo a caminar, ir con la bici o hacer “running”, es posible que sigas haciéndolo a pesar del frío. Ahora bien, ¿cómo se hace deporte en invierno?
¡Corre, corre que te pilla el frío!
La actividad física en invierno es posible, pero también que te enfermes si no tomas algunas precauciones previas para evitarlo. Así, te recomendamos lo siguiente:
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No te vistas demasiado. Porque haga frío no quiere decir que tengas que abrigarte de más. Puedes usar prendas de “fitness” que permiten conservar el calor pero que el sudor transpire. Así que prueba con varias ropas a ver con cúal vas más cómoda y si necesitas más o menos según que pases frío o no. Una prenda imprescindible es el cortavientos. Es un chaquetón que impide que entre el aire y el frío en el cuerpo. Además, no pesa apenas y te deja mucha libertad. Un equipamiento básico sería: camiseta térmica, mallas compresoras para que den calor, zapatillas y cortavientos. Aparte los accesorios que quieras o necesites.
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No te olvides de calentar. De hecho, tanto el calentamiento como la relajación la debes hacer en casa. Esto es porque, a la hora de calentar, estarás fría y, hacerlo en la calle, cuando no estás lista para la temperatura que hay, puede hacerte desistir de salir. En cambio, si dedicas unos 5 minutos a calentar en casa, el resultado será diferente. A la hora de relajarte pasa igual, si paras de golpe para relajar, el frío puede afectar negativamente a tu cuerpo y tener problemas musculares. ¿Lo mejor? Hacerlo en casa.
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Cuidado con el frío. Si bien es cierto que estamos a favor del ejercicio físico en invierno, debes tener cuidado y evitar los días de más frío o las horas de más frío. No salgas a esas horas y céntrate en las que haya más sol. En caso de que no puedas, por el trabajo, intenta ir a otro sitio porque no te convendrá (al final acabarás resfriada o teniendo un buen accidente por el camino).
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Puedes utilizar guantes, gorros, bufandas, calcetines, etc. para proteger las partes que más van a salir perjudicadas por el frío (hablamos de la cabeza, las manos y los pies). Así que utilizar accesorios que las resguarden del frío, lluvia, etc. es importante.
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Recuerda dejarte todo hecho cuando vuelvas a casa. En cuanto llegues, quítate todo y a la ducha. Si después te tomas una bebida caliente, mejor que mejor.
Con todo esto seguro que salir a hacer ejercicio en invierno no se te hace tan pesado y puedes seguir con la rutina que tenías sin miedo a hacerte daño o a pasar más tiempo en cama debido a gripes, resfriados o problemas musculares.