Hoy el mundo de la música está de luto y es que nos hemos despertado con la trágica noticia de la muerte de uno de los mejores, si no el mejor, guitarrista de todos los tiempos: el gran Paco de Lucía.
Un infarto es el que ha puesto fin a la vida de aquel artista que contaba con 66 años de edad y que se encontraba en México descansando. Concretamente estaba en la playa con su hijo cuando sufría ese ataque al corazón, del que no ha logrado sobrevivir.
Su familia, entre la que se encuentra su sobrina Malú, así como sus amigos o sus fans están sobrecogidos por la noticia del fallecimiento de este hombre sencillo y de alma flamenca que, desde que comenzara su andadura profesional en la década de los años 60, consiguió enamorar a todos con su música. Su sensibilidad conseguía transmitirla a las cuerdas de su guitarra que transformaban aquella en notas que llegaban al corazón de quienes lo escuchaban.
Por eso, en vida recibió el cariño del público y un sinfín de galardones (Premio Nacional de Guitarra de Arte Flamenco, Premio Príncipe de Asturias de las Artes, Medalla de Oro al Mérito en las Bellas Artes…) que venían a alabar su maestría musical o el haber conseguido internacionalizar el flamenco, ahora ya catalogado como Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad.
Hoy, por tanto, los amantes de la buena música no pueden más que llorar la muerte de Paco de Lucía, el artista que conseguía emocionarnos con un simple rasgueo de las cuerdas de su guitarra.
