Ayer noche se sentaba en el plató de “Sálvame Deluxe”, Kiko Rivera. Como él reconocía, lo hacía por dinero y fundamentalmente porque consideraba que había llegado el momento de poner las cosas en su sitio.
Cansado de los comentarios, rumores y opiniones vertidas por periodistas o por personas que habían formado parte de su entorno, decidido conceder una entrevista a Jorge Javier Vázquez que fue, ante todo, explosiva. Y es que no dudó en dar cuenta de multitud de cuestiones referentes a su vida a las que antes no había contestado:
- Lamentó que llevaba tres semanas sin ver a su hijo porque la madre, Jessica Bueno, se lo había llevado a Éibar donde ella está viviendo con su nuevo novio (Jota Peleteiro).
- Afirmó que su ex pareja le había informado de ese cambio de residencia sólo 24 horas antes de llevarlo a cabo.
- Reconoció que había interpuesto una demanda para conseguir la custodia compartida de su hijo Francisco.
- Dejó claro que cuando se separó de Jessica ya no estaba enamorado porque no eran incompatibles y porque ella era una persona posesiva y dominadora.
- Manifestó que consideraba que ella había ido a cazarle, que era inmadura, caprichosa y que no estaba siendo buena madre al separarle de esta manera de su hijo.
Estas fueron algunas de las “bombas” que Kiko Rivera lanzó durante su entrevista, en la que reconoció que la familia no estaba pasando un buen momento. Todo ello sin olvidar que, tras ser “atacado” en varias ocasiones respecto a su no asistencia a la boda de su hermano Fran, el hijo de Isabel Pantoja reconoció que no fue porque aquel no le invitó.
En este aspecto, afirmó que el único que le llamó para invitarle al enlace fue su otro hermano, Cayetano, pero que consideró que quien debía haber realizado esa llamada era el futuro marido.
cobrando si que habla, en cambio al salir de su casa o en aeropuertos, no dice nada