El verano ha llegado. Y con él llegan los tan deseados días de sol y playa. Pero con los días de playa llega la exposición al sol, a la arena, al cloro… y todo ello puede resentir nuestros ojos y nuestra vista. Ante ello, las gafas de sol graduadas suponen una medida muy efectiva a la hora de proteger la salud de nuestros ojos, también cuando estamos en el agua.
A continuación te proponemos algunas pautas y medidas a tomar para proteger uno de los sentidos más importantes que se puede ver expuesto a posibles daños este verano. Toma buena nota:
- Las gafas de sol siempre homologadas
En este sentido no cabe excepción. Las gafas deben ser siempre homologadas y que ofrezcan garantía. - Cuidado con los filtros
Los cristales con filtros pueden provocar una dilatación de la pupila. Y eso implica una mayor exposición solar ocular. - ¡Cuidado con las lentes de contacto!
Usar lentes de contacto en el mar o la piscina aumenta el riesgo de infecciones. - Protégete al leer
Disfrutar de la lectura de un buen libro o revista en la playa es un habitual. Sin embargo, una luz tan intensa como la del sol en la playa, puede afectar nuestra vista; para evitarlo utiliza sombreros o garra con visera para atenuar la exposición. - Más vale prevenir que curar
Si utilizas lágrimas artificiales mantendrás tus ojos hidratados y ello, ante tantos riesgos, es muy beneficioso.
Este verano, no olvides protegerte del sol y todos los agentes externos que pueden afectar a tu salud. Tampoco descuides la salud de tus ojos y tu vista.