Aunque todavía queda tiempo hasta navidad, seguro que te has dado cuenta de que, justo antes de Halloween, ya empezaban a emitirse anuncios de juguetes y, ahora, son cada vez más los anuncios infantiles que salen en la televisión. Si a eso añadimos que en muchas ciudades ya están puestas las luces navideñas, que ya hay turrones y dulces de Navidad en las tiendas e incluso la decoración de Navidad en las tiendas se deja ver, ¿podemos decir que es época navideña? Sin duda, así es.
La época navideña no era tan materialista como es ahora. Antes no hacía falta regalar tanto para que la otra persona fuera feliz, pero en realidad esto pasa. Pero, cuando se tienen niños, el hecho de regalarle todo lo que quiere y gastarte mucho dinero para hacer puede ser contraproducente, no sólo por el dinero que pierdes al comprar todos los regalos, sino porque los niños han de entender que, Papá Noel y los Reyes Magos no son ricos para llevarle todo. Como dice la directora del Centro de Psicología López de Fez en Valencia, Alicia López de Fez, “al darles todo lo que piden, se vuelven inmaduros e insaciables. A la larga, se convertirán en adultos insatisfechos, para los que nunca nada será suficiente”.
Y es que muchas veces se les acaba malcriando en ese sentido. ¿Qué hacer entonces? Algunos padres aplican este tipo de trucos para conseguir que sean conscientes de que no pueden tenerlo todo:
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En el caso de Papá Noel o Santa Claus, es una figura icónica en todo el mundo y según su leyenda reparte a todos. Por tanto, no puede dejar más cosas en una casa que en otra (además de que sólo es una persona). Se le puede concienciar al niño de que pida sólo un regalo, ya que Papá Noel es una persona sola, y que sea aquello que más ilusión le haga. Al margen queda regalarle después algún detalle que necesite o no espere pero no todo lo que ponga en la lista (que suele ser muchísimo).
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Hay que concienciarlos de que estas figuras reparten regalos a todos y que han de compartir. No pueden tenerlo todo porque los demás niños también necesitan de regalos.
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Convendría que ellos mismos formaran parte de los “amigos invisibles” para que entiendan el significado de lo que es regalar a otra persona que te importa. Esto se puede hacer dentro de la familia como un juego navideño y la ilusión que se genera es algo que les encantará.
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Muchos padres lo que hacen es poner un límite en los regalos que su hijo va a recibir. No hay que olvidar que, en muchos hogares, los niños reciben por parte de los padres, abuelos, tíos, etc. y se juntan con un montón de regalos que, al final, no pueden atender ni saben qué hacer con tantos.
¿Qué opinas tú de regalar muchas cosas en Navidad a los niños? ¿Crees que se hace bien o que es demasiado para que los niños entiendan el significado del regalo?
