Dentro de poco las piscinas y la playa será lo que más quieran los niños y donde quieran estar todo el tiempo. Sin embargo, teniendo en cuenta que los accidentes en las piscinas han aumentado de modo alarmante y que cada vez más niños mueren en esta época debido a accidentes de caídas o a ahogamientos, lo mejor que se puede hacer es enseñarles.
Es normal que los niños quieran estar en la piscina y que les guste pero a veces, el quitarle la vista de encima, hace que puedan sufrir accidentes. ¿Qué tal si le enseñas a tu hijo ante un accidente en la piscina, por ejemplo que se caiga y no haya nadie?
Una de las mejores formas que puedes conseguir para enseñarle es apuntarle, desde pequeño, a clases de natación. Hay para bebés pequeños, lo cual ayudará a tu hijo a saber actuar en caso de que se caiga al agua.
Uno de los trucos para que no le pase nada es que, si se cae al agua, sepa hacer el muerto, con la cabeza fuera del agua, para poder respirar y a la vez llamar la atención pero, si además se le enseña a darse la vuelta y que nade hacia uno de los filos de la piscina, a intervalos cortos, para después volver a la posición boca arriba, estarás consiguiendo darle más esperanza a tu bebé.
¿Te animas a ayudar a tu bebé así?