Se dice que el avión es el medio de transporte más seguro y el que registra un menor porcentaje de accidentes si se compara con otros medios, como el tren o el coche, pero hay que reconocer que los accidentes de avión, aunque poco frecuentes, no suelen pasar desapercibidos por la magnitud del hecho, y el número de víctimas, mortales o no, que suelen registrar. Esta mediatización de los accidentes de avión hace que el temor a volar sea habitual y difícil de combatir.
Pero aun lo acentúan más accidentes tan extraños como el último ocurrido en Malasia, y del que poco o nada se sabe, solo que se encontraba en fase de crucero cuando desapareció, aunque los últimos datos indican se podría haber seguid volando durante varias horas, aumentan aun más la sensación de intranquilidad de los viajeros.
¿Pero cuándo son más inseguros los aviones?
Los datos lo dejan muy claro, casi el 50% de los accidentes se producen en los momentos anteriores al aterrizaje, de hecho, durante la llamada fase de aproximación es cuando existen más posibilidades de que haya un incidente de motores, combustible o maquinaria que desencadene una tragedia aérea.
Sin embargo, no hay que preocuparse demasiado, las posibilidades de que haya un inccidente durante un vuelo es de 2 por cada 1.000.000 de vuelos; y para accidentes con consecuencias graves o muy graves, estas posibilidades se reducen aun más, hasta convertirse en una entre un millón.
Así que, a partir de ahora, cada vez que se coja un vuelo habrá que reservar la mayor parte de los miedos al último momento, del resto del viaje se puede disfrutar, casi, con la mayor tranquilidad.
