Hay una norma en el caso de las escuelas infantiles donde se dice que los niños no deben permanecer en la misma más de 8 horas diarias. Esto se trata de cumplir pero lo cierto es que no siempre se puede y en realidad hay una explicación para ello, que quizás no se tiene en cuenta cuando se echa el grito en el cielo sobre el tiempo que pasan en las escuelas los niños.
Imagina un padre que tiene que entrar a trabajar a las 9 de la mañana. Podrías pensar que deje a su hijo a las 8.30 en la escuela infantil pero… ¿y si tiene 1 hora de camino al trabajo? Porque hay que reconocer que no todos tienen el trabajo en la puerta de la casa. Entonces, si no tiene con quién dejarlo, tiene que llevarlo a las 7.30, en aula matinal.
Ahora, imagina que esa misma persona trabaja de 9 a 5 de la tarde, ininterrumpidas (es decir, que trabaja 8 horas sin comer, que no es lo habitual salvo que te den la comida en el trabajo). Lógicamente tiene otra hora de camino a casa para recoger al pequeño. ¿Qué hace entonces? ¿Lo deja solo en casa? No todas las personas tienen ayudas para poder cuidar a un hijo, y las escuelas infantiles no son centros de trabajo donde el pequeño se “mate” a aprender, hay que reconocerlo.
¿Que esto no debería pasar? Totalmente de acuerdo, pero hoy día en que el trabajo escasea y que todos, grandes y pequeños, tenemos gastos, no podemos obligar a una persona a que pase tiempo con sus hijos cuando no se puede llegar a fin de mes.
¿Qué opinas tú?