Durante los primeros días de vida del bebé sabes que la actividad principal que va a realizar durante una media de 18 o 20 horas va a ser dormir porque los bebés necesitan muchas horas de sueño. Sin embargo hay ocasiones en que los bebés tienen problemas para conciliar el sueño o se despiertan cada dos o tres horas y les da igual que sea de noche o de día. El resultado de esto es que los padres no descansan y, muchas veces, es necesario conocer cuál es el patrón del sueño en los bebés.
Como norma general los bebés duermen ocho horas por el día y ocho horas por la noche. Existen ciertas interrupciones de dos a tres horas pero cada bebé es diferente y cada uno tiene una pauta diferente.
Si el niño o la niña bosteza y se frotan mucho los ojos lo mejor que puedes hacer es cogerlo y alejarlo del ruido en el caso que quieras que no se acostumbre a dormirse con ruido, algo que recomendaríamos no fuera así. Estos gestos pueden deberse a que el niño está soñoliento y que, con un poco de tranquilidad, es capaz de coger el sueño por sí sólo.
Ten en cuenta que los bebés, como los adultos tienen dos fases importantes en el sueño, la fase REM donde hay movimiento ocular rápido y es la más frecuente en los bebés, donde le ocurren los sueños; y la fase no REM, que tiene a su vez cuatro etapas: somnolencia, sueño liviano, sueño profundo y sueño muy profundo. Si el bebé se despierta en alguna de las fases le es muy difícil conciliar de nuevo el sueño.