En verano y de vacaciones no tenemos que madrugar pero eso no significa siempre que podamos dormir a pierna suelta, a veces nos cuesta incluso más dormir a gusto ¿qué podemos hacer?
El calor, el peor enemigo de nuestro sueño, la temperatura ideal estaria alrededor de los 18º pero eso es imosible con estos calores, no debemos en todo caso superar los 29º o nos seria muy dificil dormir, pon ropa de cama ligera y si es de algodón mejor, los tejidos naturales, tanto en la ropa de cama como en el colchón son los mejores.
La comida, otro enemigo, es mejor hacer cenas ligeras que muy copiosas y nada de picantes ni de bebidas energéticas y como poco hora y media antes de irse a dormir
No te tires toda la mañana en la cama aunque puedas, no por dormir más horas es más sano, cada persona tiene su ritmo, unos necesitan más y otros menos pero tampoco te pases.
Hacer ejercicio pero no justo antes de dormir, mejor a media tarde, no es necesario más de 20 minutos al día, hara que nuestro cuerpo esté más cansado y durmamos mejor.
Fuera ruidos, el silencio es fundamental para poder dormir, si te quedas en la ciudad a lo mejor disfrutas de más silencio, aprovechado.
Adios a las luces. La glándula pineal es sensible a la luz y cuando disminuye la luminosidad, se segrega más melatonina (también conocida como la hormona del sueño), que induce al estado de relajamiento y somnolencia. Es una hormona que regula el sueño, así que si hay luz por la noche, se segregará menos melatonina y costará más descansar bien. Al amanecer, se inhibe su segregación y aumenta la de la serotonina, que interviene precisamente en la producción de melatonina. La intensidad de la luz artificial por la noche en las ciudades no ayuda a regular el ciclo natural del sueño. Tanto salir de noche han cambiado los patrones del dormir, hemos cambiado los ritmos naturales.
