El embarazo es uno de los momentos más hermosos para una mujer ya que siente esa vida que lleva dentro y se establece un vínculo con ella más allá del ser hijo o hija. Durante los 9 meses que dura el embarazo se puede llevar una vida normal pero, en invierno, no está de más aplicar una serie de cuidados extras que puedan evitar cualquier problema.
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Toma vitamina D. Esto te ayudará a absorber más calcio de todos los alimentos. No necesitas ninguna pastilla, sólo tomar el sol ya que es lo que te dará esa vitamina (de ahí que en verano se recomiende tomar algo de sol, para recoger esa vitamina).
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Cuidado con resfriados, gripes y demás. Como estarás embarazada, no podrás tomar medicamentos pero, en la medida de lo posible, sí que vas a poder tomar remedios naturales, no sólo para curar esos estados gripales, sino también para prevenir el que se resienta tu salud con la enfermedad. Por ejemplo, el jengibre te ayuda a eliminar la tos y la garganta irritada o la miel, que actúa combatiendo virus y bacterias. Si no te fías, pregunta antes a tu médico y dale la información para que lo sopese.
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Hidrátate. Debes tomar hidratación tanto por dentro como por fuera. Por dentro el agua, caldos, sopas, infusiones, etc. Recuerda que el agua es imprescindible para tu organismo y ahora sois dos en él. En cuanto a por fuera, las bajas temperaturas harán que tu piel esté más reseca y aparezcan las grietas. Evítalas con cremas adecuadas.