El ginecólogo es uno de los médicos que, sobre todo al principio, da más corte ir porque es una cita médica para una zona íntima. Sin embargo, hoy día se recomienda acudir al ginecólogo desde pequeñas, desde que se produce la primera menstruación, y verlo como un chequeo rutinario e importante a llevar a cabo para cuidar la salud sexual e íntima que se tiene.
Ahora bien, ir al ginecólogo, como dicen las mujeres mayores, ir con ropa interior nueva y limpia. Es algo que siempre se dice para cualquier médico. Así que te vamos a dar algunos consejos para que vayas más cómoda y, además, más segura:
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Dúchate bien. Si la cita la tienes por la tarde, puedes ducharte antes de comer y, antes de salir de casa, lavarte la zona íntima para que no haya problemas de olores corporales que pueden darte problemas o hacerte sentir mal.
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Ropa cómoda. Ponte ropa cómoda porque, quieras o no, vas a tener que quitarte todo o parte de la misma de tal manera que si ves que tardas mucho puedes ponerte nerviosa. Es mejor ropa que sea fácil de poner y quitar para ocuparte de otras cosas más importantes.
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Depílate. Eso sí, si te depilas con cuchilla, puede ser que estés incómoda porque te pinche. En esos casos es mejor recortar el vello del pubis o, incluso, dejarlo tal y como está (ya que ahora los ginecólogos están a favor del mismo).
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Pregunta. Todas las dudas que tengas, no te quedes con ellas. Acudes a un profesional que no tiene que hacer su trabajo y ya está; está ahí para orientarte, para aclarar tus dudas y sobre todo para asesorarte o para informarte de aquello que tú no sabes.
