Uno de los problemas que tu hijo puede tener, y que normalmente desaparece cuando entran en la adolescencia, es el sonambulismo, la capacidad de, aún dormido, contestarte cuando le haces una pregunta o levantarse de la cama y caminar dormido por la casa, o incluso fuera de ella.
Es un problema que no tiene una causa delimitada, es lo que les sucede a muchos niños de pequeños y tampoco es algo que puedas pensar que es grave. Solo en casos extremos donde los niños se van de casa o cogen algo que puede resultar peligroso es cuando hay que preocuparse.
Pero, ¿qué hacer ante el sonambulismo? Pues bien, lo más importante y lo que aconsejan siempre es que no se despierte al niño. Hay que tratar de llevarlo a la cama con tranquilidad, guiándolo para que no se tropiece ni se haga daño con nada.
Conviene que, antes de irte a dormir, vigiles un poco tu casa para ver si hay algo en medio o algo que pueda resultar peligroso para el niño pero no deberías mover nada de sitio por una sola razón. El niño soñará que está en su casa así que, si cambias algo, en su sueño él no lo verá y se tropezará.
Sobre todo, la puerta de la calle y las ventanas son las que debes cerrar con mayor seguridad para evitar que pueda usarlas. Si echas la llave, no las dejes puestas y en el caso de las ventanas usa sistemas de seguridad puestos cuando él no te vea para que no sepa que están instalados y así no los quite en su sueño.
Si puede ser, haz que el niño duerma cerca de ti para despertarte pronto y vigilarlo. A veces está bien seguirlo y ver qué hace porque el sonambulismo también puede surgir por un problema psicológico.
