El verano, los cambios de temperatura, no comer bien, beber agua fría y todas esas cosas pueden pasar factura al estómago y acabar unos días bastante fastidiada por culpa de ello. Es algo habitual que puede pasar, bien por no lavar adecuadamente los alimentos, o por comer cosas que no se deberían (lo que viene a decirse que se ensucia el estómago).
¿Qué se puede hacer ante ello? Pues hay varias cosas que podrías hacer entre las cuales están:
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Tomar un día de suero. No hace falta que sea un suero de farmacia, que por cierto están malísimos, sino más bien uno hecho en casa. Es fácil, solo tienes que poner un litro de manzanilla, dos cucharadas soperas de azúcar, un poco de zumo de limón, una pizca de sal y otra pizca de bicarbonato. Tomando eso un día completo al día siguiente estarás mucho mejor. Pero no vale picar nada.
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Toma alimentos que sean muy ligeros. Nada de barbacoas, helados y otras cosas así, tienes que moderarte un poco así que procura no pasarte.
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Lava muy bien los alimentos, incluidas las lechugas pues, como en verano lo que más se come son las ensaladas, éstas pueden sentar mal si no se lavan de forma adecuada.
En cuanto al agua, muy fría hará que te duela el estómago así que procura no tomarla tan fría o hacerlo a sorbos pequeños para que se acostumbre. Si estás con el estómago lo mejor es beber agua ligeramente fría (por ejemplo agua a temperatura ambiente con 1-2 cubitos).
