Dime una cosa, ¿cómo ves tus rodillas? ¿Son finas? ¿Quizás anchas? Es posible que hayas contestado lo segundo, además de decir que no te gustan. Y es algo que hay que tener muy en cuenta porque, si buscas un milagro para conseguir que se vuelvan finas, te va a ser complicado, no existe.
Las rodillas anchas lo que implican es que hay mucha grasa en tu cuerpo y hay que eliminarla para que no se convierta en un problema grave. ¿Sabes lo que tienes que hacer?
Ejercicios para rebajar la grasa de rodillas (y cuerpo)
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Busca ejercicios de alta intensidad para hacerlos, aquellos que te hagan sudar lo más grande. ¿Por qué? Pues porque necesitas hacer eso para quemar ya que tu cuerpo, muchas veces, lo que hace es acostumbrarse al ejercicio y, cuando lo ha logrado, ya no sudas.
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A andar. Andar todos los días, media hora. Es lo que necesitas. Y, si no puedes, no es verdad: sube escaleras, ve al trabajo andando (o aparca más lejos y anda). Hay muchas formas de hacerlo, no seamos malos inventando excusas.
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Haz ejercicios específicos para rodillas y grasas. Por ejemplo, si haces ejercicios de piernas vas a conseguir que haya menos grasa en esa zona.
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Despídete de la sal. La sal retiene líquidos así que, una de las cosas que necesitas, es no hacer que tú retengas más, sino soltarlos. ¿Cómo? Pues echando menos sal.
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Más alimentos naturales y menos grasas. Hay que comer sano, y nada de bollería industrial, snacks, patatas, grasas, fritos, rebozados… Sí, vale, todo eso está muy bueno, pero en su justa medida.
