A la hora de consumir calcio cuando estás embarazada, una de las cosas que has de hacer es sabor consumirlo de forma adecuada. Y es que no es solo el hecho de que se consuman alimentos ricos en calcio sino que se haga de forma que puedas sacar el máximo beneficio de ellos. Así, tienes que los alimentos hay que consumirlos a diario, no solo de vez en cuando.
Un cuarto de leche tiene 300 mg de calcio y también tienes eso mismo en 2 yogures o en 80 gramos de queso blando. Así que siempre puedes variar.
También hay que realizar un poco de actividad física que te ayudará a estimular los huesos y a reforzarse además de que, en el embarazo, andar media hora diaria puede ser muy beneficioso para tu cuerpo.
No te olvides de beber agua mineral que, por si no lo sabes, contiene 250mg de calcio por litro y eso también es un aporte importante, no porque te bebas toda la botella, sino porque por pocos miligramos que sean, son importantes.
Por último, pasa absorber el calcio, te recomendamos que tomes el sol, si puede ser con las piernas y brazos desnudos, para que tu cuerpo tome la vitamina D que necesita. De todas maneras, si no puedes tomar el sol, la yema de huevo o el pescado puede ayudarte a consumir un poco de esta vitamina.