Uno de los platos que suelen comerse en las dietas es el calabacín a la plancha. Se trata de un alimento muy rico en nutrientes y que apenas tiene calorías. Lo único que aunque te llena mucho al principio, después te vuelve el hambre (pero es cuestión de engañarla).
Si quieres preparar calabacín a la plancha aquí te decimos cómo hacerlo.
Ingredientes: calabacín (normalmente, para una persona, con medio o un calabacín es suficiente), aceite y sal.
Preparación. Empieza lavando el calabacín con agua para que esté libre de cualquier sustancia. A continuación pártelo en rodajas. Aquí no podemos decirte el grosor ya que dependerá de la persona pero si no se parten muy gruesas suele salir bastante bueno.
Mientras lo partes, coloca una sartén con un poquito de aceite al fuego. Si tienes oportunidad de colocar una plancha mejor que mejor porque se hacen más ricos. Cuando esté caliente echa las rodajas de calabacín y estate pendiente de darles la vuelta cuando veas que se doran. Al hacerlo, échale la sal al gusto. Normalmente con un vuelta y vuelta es suficiente para que se hagan.
El sabor, muchos dicen que es como un crepe (tortita) y que por eso entran tan bien (sobre todo si los pones finitos). Si te has pasado con el aceite tendrás que colocarlos en un plato o una fuente con servilletas debajo para que empapen el exceso (y echar menos la siguiente vez).
