Uno de los ejercicios que puedes realizar tanto en verano como en invierno a través de las piscinas cubiertas es el aquagym, una actividad física que consiste en hacer ejercicios en el agua, a veces sin necesidad de otros accesorios, otras veces con algunos de ellos.
Ventajas del aquagym
Aquellos que lo practican obtienen muchas ventajas al hacerlo. Por ejemplo:
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Al hacer ejercicio en el agua se produce un menor impacto en el cuerpo, sobre todo en las piernas, brazos y espalda lo que permite tonificar los músculos sin que apenas puedas cansarte. De hecho, el aquagym puede llegar a consumir 500 calorías en una hora, si se hace bien, y no es algo que te extenúe, al contrario, cuando sales te sentirás mucho mejor. En cambio, si hicieras lo mismo fuera de la piscina, podrías no aguantar el ritmo.
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Con el aquagym puedes mejorar el tránsito intestinal pero además combate el estreñimiento y activa la circulación sanguínea, algo que siempre viene bien.
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Vas a mejorar los dolores lumbares, cervicales, dorsales, y, en general, todo el cuerpo ya que, al estar en el agua, el cuerpo se siente mucho mejor y te ayudará a mantenerlo sano con el ejercicio que apenas notarás que estiras el cuerpo o que lo fuerzas.
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Es un deporte que puede practicarse en todas las edades.
Ten en cuenta que el aquagym tiene varias modalidades y encontrar al monitor que sea bueno eso puede tardar. Si ves que no te cansas o que no se hace algo de nivel para ti, prueba con otro monitor o pídele que aumente el ejercicio.