Con el mal tiempo y el hecho de que los niños no nos pueden decir con palabras hasta que no tienen una determinada edad, si están molestos o no, si tienen frío o no, muchas madres y padres se pueden preocupar demasiado porque su bebé no tenga frío y, uno de los problemas que se tienen, es que, si el padre o madre le toca las manos o los pies y los nota fríos, la reacción que se tiene es la de colocarle más ropa.
No decimos que esté mal pero, cuando son los pies o las manos, lo que debes hacer es ponerle unos calcetines más gordos o unas manoplas de lana pero no un nuevo jersey, siempre y cuando el resto del cuerpo lo tenga caliente.
Cada zona de su cuerpo suele funcionar de una manera, igual que pasa cuando eres adulto y las manos se te quedan heladas pero no tienes frío y te tapas las manos para darles calor. Aquí ocurre exactamente lo mismo, tienes que ponerle algo calentito en esa zona que está fría.
De esa manera no acabará teniendo calor y harás que pueda tener una temperatura demasiado elevada (cosa que no es buena, desde ya te lo decimos).
Para saber si el niño está bien con la ropa debes, con las manos con una temperatura normal, tocarlo por debajo de la ropa para ver si su piel está fría o no. También el comportamiento que tenga te ayudará a saber si necesita más ropa o no. Pero, sobre todo, no te agobies con ello; si empieza a sentirse muy incómodo llorará para llamarte la atención.