La hora del almuerzo se puede tornar en un auténtico caos si a los más pequeños de la casa no les gusta la comida o se empeñan en negarse a comer -por el motivo que sea-.
Por todos es sabido que la alimentación en los niños es muy importante y es imprescindible que lleven una dieta sana y equilibrada; pero a veces, resulta agotador lograr que coman según qué alimentos. Si es esta la situación que vives a diario en casa con tu pequeño/a, te propongo que apuestes por la creatividad.
En lugar de invertir tiempo en persuadir, negociar y discutir con tu hijo/a para que coma, te propongo que inviertas ese tiempo en hacer platos creativos, diferentes y originales. El objetivo es llamar su atención, que quede tan sorprendido/a que le sea imposible negarse a comer.
En la imagen superior puedes ver un ejemplo que ilustra a la perfección lo que quiero decir. Un ejemplo que muestra cómo un sencillo plato de arroz y tortilla francesa, se puede convertir en un espectacular plato al que sería imposible no rendirse.
Si le dedicas un poquito más de tiempo y cuidas la presentación con mimo y dedicación, comprobarás cómo la hora del almuerzo deja de ser un caos para convertirse en un momento agradable y divertido.