Las gambas es uno de los alimentos que se consume habitualmente aunque son algo caras para hacerlo todos los días. Sin embargo, de vez en cuando, no están mal.
Si quieres hacerlas de una manera diferente, hoy te vamos a proponer algo: hacer gambas rebozadas. En esta receta no hemos puesto sal pero si eres de los que le suele echar, te recomendamos que la eches después, cuando lo sirvas, y en escamas de sal, así tendrá un toque todavía más diferente, que no quiere decir malo. Todo es probarlo, verás de lo que hablamos cuando lo hagas.
Ingredientes: gambas, huevo, harina, ajo y perejil.
Preparación. Lo primero que necesitas es tener unas gambas que estén crudas. Tienes que pelarlas todas ellas y colocarlas en un plato.
Ahora coge un plato y llénalo de harina, la suficiente para las gambas que tengas. En otro plato echa el huevo y bátelo un poco. Añade un poco de perejil y ajo en el mismo.
El proceso es sencillo. Las gambas tienes que pasarlas por el huevo, que queden bien empapadas y, a continuación, en harina.
Pon una sartén al fuego con abundante aceite y, cuando veas que esté bien caliente, echa las gambas enharinadas para que se frían. Es muy rápido y sencillo de hacer además de que suele gustar mucho a toda la familia (siempre y cuando le gusten las gambas, por supuesto).
Las gambas rebozadas tienen muchas variantes por lo que te pueden salir diferentes según uses unos ingredientes u otros. Por ejemplo, hay quien le echa al huevo un poco de cerveza también o incluso la harina (o maizena) y agua para hacer otro tipo de rebozado.