Es posible que hayas escuchado alguna vez que, nada más levantarte, y después de ir al baño, lo que debes hacer es beber un vaso de agua, ¿a que sí? Es una práctica que, cada vez más, se recomienda tanto por aquellos que lo llevan a cabo como por los médicos y profesionales.
Y es que beber agua en ayunas te ayuda en el día a día. Por si no lo sabes, aquí tienes las ventajas de consumir un vaso de agua al levantarte:
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Tu aspecto será mucho mejor. El agua por dentro de hidratará y tu piel se verá más brillante, suave y con un mejor color. Eso se notará nada más te miren y darás una imagen mucho más hermosa de ti.
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Limpiarás tu organismo. Cuando dormimos, por el hecho de estar tumbados y que las funciones se relajan, pueden quedar restos en el organismo. Con un vaso de agua todos los órganos se pondrán en funcionamiento y se limpiarán. De esta manera, los mantendrás mucho más sanos.
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Adiós estreñimiento. Muy relacionado con lo anterior. Si bebes un vaso de agua vas a tener un antes y un después en esos ataques de estreñimiento que tienes. Y es que si le das la hidratación que necesita a tu cuerpo se regulará automáticamente. Así que ya sabes, a beber agua.
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No tendrás tanta hambre. De hecho el cuerpo puede subsistir sin alimentos, así que si le das agua el cuerpo podrás hacer frente a esos ataques de comida que te dan de vez en cuando o bien los excesos (porque comerás menos).
