Uno de los mayores problemas que se tienen cuando se hace una dieta, o cuando se vive un día, es el picoteo. Ya sea mientras haces la comida, después de ésta, o en otras ocasiones, acabes tomando algo que no debes y no es extraño que, al final, tengas que comprarte ropa más grande.
¿Qué hacer en ese momento? No picar entre horas. Y sí, es cierto que no puedes resistirte pero, ¿y si te decimos que sí? Lo importante es no obsesionarse con la comida que, aunque no lo veas, se produce debido al estrés o la ansiedad que vivimos. Por eso, aquí van unos trucos:
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Nunca te saltes el desayuno. Procura comer porque es lo que te dará energía. Pan, aceite, cereales, galletas. Desayuna en abundancia y bien.
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Si quieres picotear, adelante. PERO, que sea fruta o yogurt. De ahí no te salgas. Como mucho, una gelatina 0%, pero nada más.
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Si te da hambre y no quieres caer en la tentación del picoteo, bebe agua.
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Ojos que no ven, corazón que no siente. Guarda todo lo que te apetece en el picoteo en el lugar más difícil de acceder de tu casa. Aunque parezca mentira, el saber que has de hacer mucho para conseguirlo, hace que, en muchas ocasiones, se acabe por desistir.
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Cuidado con la comida light que, aunque diga eso, no quiere decir que realmente sea así, que se pueda tomar más cantidad o incluso que sirva para picotear por ser así.
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Si tienes ansiedad, masca un chicle, o haz algo que de verdad te haga olvidar que tienes hambre (porque en la mayoría de los casos no es hambre lo que se tiene sino aburrimiento).
Seguro que, con estos trucos, consigues dejarte del picoteo.
