Como sabes, la música en el embarazo es algo que muchas madres hacen ya debido a los beneficios que ofrece en el bebé y en la relación madre-hijo. Sin embargo, hoy no queremos hablarte de esa música sino del canto, que la propia madre le cante al bebé, una técnica de relajación que favorecerá a ambos en los meses que van a pasar unidos, e incluso después.
Canto carnático
La música prenatal se ha convertido desde hace años en algo habitual. Han sido muchas las marcas que han sacado ese tipo de música para embarazadas a fin de aprovechar los beneficios que tiene para el feto, el bebé y la propia madre.
El canto carnático no es en realidad algo igual, va más allá porque lo que hace es utilizar el sonido de la voz de la madre con la respiración para conseguir crear una melodía que de muchos más beneficios al bebé. Lo que ocurre en el canto carnático es que se articula en vocalizaciones ayudando a que la madre se relaje, sepa respirar bien y pueda hasta aliviar los dolores que tiene.
De hecho, entre los beneficios que tiene la técnica para la madre es aliviar tensiones, contracciones en el momento del parto e incluso hacer que el bebé esté más tranquilo en ese momento.
Como te decimos, es una técnica que se puede utilizar desde el tercer mes de embarazo para conectar con el bebé. Ya en el quinto mes el pequeño podrá escuchar con claridad y es el momento en que se puede entablar una relación con esa vida que crece dentro.
Beneficios del canto carnático
Los beneficios del canto carnático son los siguientes:
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Ayuda a mejorar la respiración y la postura. Esto te sirve para olvidarte de dolencias por malas posturas o a que no seas capaz de seguir el ritmo después en los tipos de respiración para embarazadas que se suelen enseñar.
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Ayuda a expresar sentimientos ya que, según sea la canción, tu estado de ánimo será uno u otro.
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Ayuda a relajarte, porque es una forma de sentirte acompañada y de hacer que tu voz calme tu cuerpo y lo que hay dentro. Esto es incluso importante en el parto, mucho más efectivo que cualquier calmante.
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Fortalece la relación entre madre y bebé.
Según el momento en que te encuentres, los beneficios también pueden ser diferentes. Por ejemplo, durante el embarazo, el canto carnático te ayudará a crear un vínculo con esa personita que está dentro y te ayudará a prevenir y reducir la ansiedad al tiempo que controlas la respiración y eres consciente de todo tu cuerpo (porque en el canto se puede llegar a utilizar todo).
En el caso del parto, cantar te ayuda a distender los músculos del útero, el canal vaginal y el perineo. Además, vas a liberar endorfinas porque cantar siempre nos pone alegres, de ahí que el dolor pase mucho mejor que si te tomas un calmante que te deja atontada y no disfrutas del momento de traer una vida al mundo.
Además, también el canto carnático lo puedes utilizar en el posparto, primero que aliviar al bebé al encontrarse en un lugar desconocido, y segundo porque se produce un mayor apego del bebé hacia una voz que reconoce de siempre.
