Uno de los ejercicios que, cuando vas a un gimnasio, te hacen hacer siempre es andar sobre una cinta, para que quemes calorías, te dicen, y porque es un ejercicio cardiovascular. Sin embargo, no es lo mismo quemar calorías cuando vas andando en la calle, que hacerlo sobre una cinta de andar, sobre todo si no la tienes con una inclinación (que hará que el ejercicio que hagas en ella sí que pueda ser de igual efectividad que el correr en una calle).
Pero, ¿qué ventajas tiene el andar en una cinta de andar?
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Puedes perder calorías. Eso sí, como te hemos dicho antes, con una inclinación del 1% ya que, de lo contrario, no consumirás apenas energía y no te servirá de mucho el ejercicio que hagas.
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Es poco agresivo. Para las personas que tienen problemas de huesos o que han perdido la forma, la cinta de andar puede ayudarles a volver a recuperarla sin dañarse mucho ya que irá muy suave y la cinta amortigua el impacto de las articulaciones.
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Puedes simular una carrera o tener distintas velocidades sin que te vayas a forzar tú por hacerlas, al final seguirás a la cinta y te adaptarás a ella.
El problema es que también tiene ciertas desventajas que son las siguientes:
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Se pierde agilidad. El problema de la cinta de andar es que siempre se hace el mismo ejercicio y eso hace que no se haga otra cosa, que no tengas nada para tonificar los brazos, o que incluso los pies, músculos, etc. no se adapten a cambios de superficie lo que hace de la cinta de andar un ejercicio lineal.
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Tampoco entrenas muchos músculos. Aunque dicen que andar es el mejor ejercicio que hay, es andar en la calle; en una cinta de andar no se ejercitan bien los músculos sino que necesitarás de un entrenamiento cruzado para fortalecer después.
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Es aburrido. Seguro que, a los cinco o diez minutos de estar en una cinta, te has cansado de hacer lo mismo, mirar al mismo sitio o estar ahí sin hacer nada. Es lo que tiene la cinta. Como no te mueves del sitio no cambia el panorama y al final acabas aburriéndote. Da igual que tengas música o una tele, al final siempre te cansas de hacerlo y es porque, si andas en el calle, el hecho de avanzar, de que cambie el panorama y que avances en distancia hace que no te aburras hasta que has transcurrido un buen trecho.
Como ves, aquí tienes algunas de las ventajas y desventajas de la cinta de andar. Nosotros te recomendamos que, siempre que puedas, salgas a la calle a andar porque es el mejor ejercicio que hay y porque quemarás muchas más calorías con eso que con otra cosa. En cambio, deja la cinta de andar para esos días que no puedas salir de casa porque está lloviendo o porque se te ha hecho tarde. Así podrás mejorar tu figura y además tu cuerpo te lo agradecerá.
