La gala del pasado jueves de “Gran Hermano 15” si por algo destacó es por la llegada a la casa de Guadalix de la Sierra de Lucía, la ex novia de Omar, quien se encontraba viviendo una historia con Paula. Pues bien, la llegada de la nueva concursante, alteró a todos y especialmente a los protagonistas.
Así, se vivieron reproches de Paula y de Omar haciendo Lucía, indicándole, y no precisamente con buenas formas, que no debía haber entrado porque eso iba a crear mal rollo. No obstante, a pesar de las duras palabras del madrileño hacia su ex, su mirada indicaba otra cosa y eso era que esta aún significaba algo para él.
Pues bien, en apenas unas horas de convivencia, ha sucedido lo que se podía prever: que Omar y Lucía no sólo han hablado relajadamente sino que han retomado su relación. Una situación que provocó que él tuviera que sentarse con Paula para explicarle lo sucedido y pedirle disculpas por todo el daño que le pudiera hacer al tomar la decisión.
El resultado de todo ello es que los otra vez novios no paran de darse arrumacos por toda la casa, de besarse y de dormir juntos mientras que la hawaiana se ha convertido en un alma en pena que llora por todos los rincones, bajo el consuelo de sus compañeros.