Seguro que te has dado cuenta que, ahora mismo, todo el mundo tiene un afán enloquecedor por hacer pasteles, más concretamente las típicas magdalenas de siempre que ahora se engalanan para parecer otra cosa y han hecho que muchos saquen productos, accesorios y muchas más cosas con las cuales disfrutar a la hora de hacer un postre digno de un rey.
De hecho, en el mercado están cada vez trayendo más y más accesorios de repostería y también cajas con preparados para los cupcakes a fin de que no tengas que estar mucho tiempo en la cocina sino que, con ellos, ya podrás hacerlos en pocos minutos.
¿Son buenos? ¿No pasa nada por comerlos? Pues lo cierto es que sí pasa porque esos alimentos tienen muchísimas calorías. Cada 100 gramos estaríamos hablando, y solo de un bizcocho normal, de unas 350 calorías. Si a eso se le une la cobertura que tienen por fuera, que esté relleno por dentro y que se le pongan más cosas (como nata, fresas, caramelo, etc.) podemos irnos a que, 100 gramos, es decir, una media de entre 3 y 5 pasteles de esos, con unas calorías que bien podrían ser las calorías que debes ingerir en todo un día, entre 700 y 1000 calorías, lo cual hace que ese tipo de pasteles sea una bomba en activo para esos kilos de más.
Con esto no te decimos que no debas comerlas, no está mal consumirlas de vez en cuando pero no se debe convertir en algo de todos los días, ni de todas las semanas si se quiere mantener el peso o no engordar.