Aragón se transforma en verano en una tierra de aventura, para todos los públicos. Con un doble objetivo: disfrutar y mostrarte un espacio magnifico que comprende tres parques naturales, un parque nacional y una reserva de la biosfera.
El verano cambia Aragón, se convierte en un paraíso natural ideal para la práctica de actividades deportivas. Extensos bosques, caudalosos ríos, macizos rocosos, acantilados o amplios valles, que te cautivaran.
Actividades acuáticas entre montañas
La naturaleza te permitirá disfrutar de una experiencia única en esta tierra. Gracias a sus pantanos, lagos y río en los que podrás practicar piragua, vela o windsurf en los Pirineos y cercado de elevadas cordilleras.
En los Cañones de Guara y el Parque natural de la Sierra, en Huesca, podrás navegar en kayak, montar en hidrospeed o realizar una bajada en las aguas bravas. Pues imagínate haciendo esquí o descendiendo cañones profundos, toda una verdadera aventura.
Pero si te gustan las aguas mansas, el Valle de Tena en Huesca, ofrece la posibilidad de navegar en veleros o windsurf entre montañas.
Actividades multiaventura
Aragón es una tierra para toda clase de aventureros, en este gran paraíso natural podrás: desplazarte entre árboles por medio de sus copas practicando el arbolismo. Lanzarte entre cañones en tirolinas. Deleitarse con el entorno campestre en un 4×4, bicicletas de montaña o quads.
Participar en combates de paintball o poner a prueba en medio del bosque tu orientación. Sobrevolar en parapentes los valles o hacer en helicóptero vuelos panorámicos. Barranquismo, espeleología, alpinismo, etc.
Toda la familia puede vivir esta aventura. Por ejemplo, en la Estación de esquí de Formigal, en verano se preparan zonas infantiles.
Otra alternativa para la familia, es participar en las rutas ecuestres por las cercanías del Monte Perdido y el Parque nacional de Ordesa. El senderismo por los parques naturales del Posets – Maladeta o el Moncayo.