Cuando ya tienes un embarazo más avanzado se suelen acudir a las clases de pre parto donde te explican lo que va ocurrir y cómo actuar en cada situación.
Uno de los ejercicios que te van a explicar son los tipos de respiración ya que, para cada fase del parto vas a tener variedad en los tipos de respiración para facilitar que el proceso del parto.
En concreto existen cuatro tipos de respiración:
Respiración completa profunda. Se produce cuando se respira llenando al máximo los pulmones y el vientre para echarlo después todo notando como sale de tu cuerpo.
Respiración lenta. Has de tomar poco aire por la nariz y soltarlo por la boca a razón de 10 o 15 respiraciones por minuto. Esta respiración sería adecuada para la primera fase del parto.
Respiración suplante rápida. Tienes que tomar aire por la boca y expulsarlo deprisa para volver a tomar aire. Es la respiración que se usa cuando viene una contracción y mientras ésta dure.
Respiración de expulsión. Esta es la respiración quizás más difícil. Has de tomar aire por la nariz llenando al máximo los pulmones para empujar con fuerza hacia abajo ayudando a que el niño salga. También puedes hacerlo por la boca pero has de intentar contener el aliento para darle más fuerza y lograr que el bebé salga cuanto antes para evitar que el parto sea demasiado doloroso.