La mayonesa es una salsa de característico color blancuzco y que destaca por la posibilidad de potenciar el sabor de los alimentos. En las tiendas es posible encontrar distintas variedades, ya no solo la mayonesa tradicional, sino nuevas variedades que incluyen ingredientes distintos o la posibilidad incluso de reducir las calorías de esta salsa.
La forma más habitual de preparar en casa la mayonesa es utilizando una batidora en la que se puedan añadir los ingredientes uno a uno a medida que se va haciendo la mezcla, aunque, la forma tradicional de prepararla no incluía la batidora, porque aun no existía, así que prepararla sin este electrodoméstico es posible, además, no es tan complicado como podría pensarse.
En primer lugar, se separa la clara de la yema de un huevo grande, y la yema se bate muy bien con un poco de sal hasta que se consiga un líquido muy espumoso. Sin dejar de batir, en este momento se añade un pequeño hilo de aceite, que correspondería aproximadamente a una cucharada. Si los ingredientes se mezclan bien se conseguirá una masa de color beige. Aun sin dejar de remover, se añade un chorrito de limón y un poco de agua, hasta que todos los ingredientes queden bien ligados.
Si se prepara bien, la salsa mayonesa casera no tienen comparación con las mismas salsas, pero que se compran. Ideal para patatas fritas, pescado, o huevos, la salsa mayonesa puede formar parte de una dieta equilibrada si se consume con cierta moderación.
¿Habéis preparado en alguna ocasión salsa mayonesa en casa?
