Ya sabes que los embarazos no entienden de físico y da igual que estés delgada o con unos kilos de más para quedarte embarazada (al margen dejaremos el hecho de que sea más o menos difícil quedarte embarazada).
El caso es que, según el Centro de Investigación de Epidemiología ambiental, parece que han analizado los casos y, aquellas madres que tienen obesidad durante el embarazo hace que los bebés, al nacer, puedan pesar algo más, aunque los gramos que establecen son un poco de gracia porque a todos nos gusta ver a nuestros bebés sanos y gorditos al nacer porque así pensamos que están más sanos (y teniendo en cuenta que después pierden un poco de peso, más aún).
Es por esto que, los 176 gramos de más que llegan a coger, para muchos, pueden no ser nada, para otros sí. Lo que hay que valorar en estos casos sería más bien el hecho de si esos gramos afectan negativamente a su desarrollo o no, si les perjudica o bien no ocurre nada.
Con ello no decimos que estemos a favor de la obesidad pero sí se sabe que hay personas que no pueden adelgazar como les gustaría y tampoco pueden hacerlo en el embarazo donde, los antojos, pueden hacer ganar varios kilos a cualquier mujer.
En este estudio también se habló acerca de la leptina, una hormona que está relacionada con el equilibrio de energía, regulación del peso corporal, metabolismo, etc. y que estaría afectada por el sobrepeso de la madre variando sus valores a un nivel negativo para el bebé.
¿Qué opinas al respecto?