En Halloween hay muchas manualidades que se pueden hacer y que divierten a las personas debido a que son diferentes a como lo ves todos los días, es decir, que llaman más la atención por la novedad. Por eso, si tienes una tienda de gominolas, seguro que esta manualidad te encantará, y, si no la tienes, también, porque no te podrás resistir a hacer una.
Para ello vas a necesitar unas piruletas, un poco de papel de colores chillones (papel charol a poder ser u otro que sea similar), ojos saltones (los puedes encontrar en las tiendas de todo 1 euro o bien en las papelerías), pegamento y unas gomitas.
Ahora, supongo que con esto ya sabrás lo que queremos hacer. Se trata de coger la piruleta y, aún con el papel con el que la venden, poner otro encima, de color más llamativo. Si se pone en rojo se pueden hacer unos vampiros pues después solo hay que pegarle los ojos y, como accesorio, en cartulina negra y blanca, se pueden hacer y pegar una boca y unos colmillos. ¿Te imaginas algo así?
Con la gomita puedes fijar el papel de las piruletas y, si tienes tiempo, puedes, por ejemplo, hacer las alas del murciélago o bien, con cartulina blanca, una capa si haces unos fantasmas. Lo cierto es que la imaginación va a jugar mucho aquí y será una forma curiosa de presentar los dulces a los niños si van a pedirte “Truco o Trato”.
¿Te animas a darles algo así a tus hijos?