¿Quieres hacerle un fantasma a tu hijo para Halloween? A veces puedes pensar que es bastante complicado hacer eso pero lo cierto es que no es así y te demostraré eso mismo porque, por si no lo sabes, el fantasma lo puedes hacer fácilmente con un plato de los de plástico. Sí, solo necesitarás eso, cartulina blanca y, si me apuras, una gasa blanca para hacerlo más fantasma aún.
Empezamos:
– Coge el plato de plástico y, con un lápiz, perfila los ojos y boca del fantasma. Hazlos feos para que dé más miedo. Esos irán pintados de negro así que puedes usar pintura o rotuladores, lo que tengas más a mano.
– Lo siguiente es recortar en la cartulina unas manos que también asusten. No te preocupes si no salen iguales, mejor, así dará más miedo. Recórtalas y pégalas por detrás del plato.
– Ya tendrías el fantasma pero si quieres añadirle algo más podrías pensar en poner una gasa blanca por encima o debajo del plato. Con el viento parecerá que se mueve y creará la ilusión de que realmente se está acercando a uno. ¿Te imaginas el miedo que vas a crear?
Con este mismo sistema puedes hacer otro tipo de manualidades infantiles, solo has de pensar qué puedes dibujar en el plato (por ejemplo las calabazas si no tienes cerca en casa y quieres un Halloween con alguna que otra calabaza (por la leyenda de Jack, claro).