El calcio es uno de los elementos principales que se deben de consumir desde que empezamos a crear la vida, el feto, hasta los 25 años (para asegurarnos de que hay un gran acumulo de calcio) y hasta nuestra vida final porque el cuerpo lo necesita (no en exceso pero sí en su justa medida).
Para poder almacenarlo de la mejor manera posible, sobre todo en el embarazo, te damos algunos consejos que te vendrán bien:
– Consume lácteos a diario. Aparte de que son una importante fuente de calcio, más incluso que un vaso de leche, lo cierto es que pueden aportarte mucho más a tu organismo, entre ello mejorar la flora intestinal para ir mejor al baño.
– Bebe agua mineral. Éstas también contienen una proporción de calcio y si lees la etiqueta podrás saber cuál es la que mejor te conviene.
– Realiza algo de ejercicio físico porque eso estimula los huesos y los hacer reforzarse, consumen el calcio y endurece los huesos, más en el embarazo donde, un paseo de unos 20 minutos todos los días puede ser idóneo.
– Asimila vitamina D, es la que te ayuda a absorber bien el calcio así que esa vitamina puedes encontrarla en el sol o en algunos alimentos.
Ahora no tienes excusa para no consumir leche o productos que tengan calcio y que te sean sanos para ti y para tu bebé.