Pedir perdón, así como otro tipo de palabras de educación como “por favor”, “gracias”, etc. es algo que a los niños hay que enseñárselo desde pequeños para que sepan que decirlas no es algo malo, sino algo de educación y para saber que la otra persona te importa.
Es habitual que a los niños les cueste mucho pedir perdón porque saben que eso significa que estaban equivocados y a los niños no les gusta eso. Tampoco les gusta el hecho de que se les riña y tengan que reflexionar sobre su comportamiento pero es algo que deben aprender.
Eso sí, si tu hijo o hija no quiere pedir perdón no le fuerces; tan solo explícale en qué se ha equivocado y dale un tiempo para que haga lo que esperas de él. Casi siempre da resultado, el niño al cabo de un momento va a ti a pedir perdón pero hay ocasiones en que es demasiado tímido.
Si es así, acompaña al pequeño hasta la persona a la que debe disculparse y no le digas lo que debe hacer. Si no le salen las palabras “perdón” o “lo siento”, los gestos también son importantes; un beso, un abrazo es suficiente para pedir perdón. Más adelante podrán decirla sin que les de tanto corte si sigues educándolo de esa manera.
Con respecto a otras palabras se sigue un aprendizaje similar con lo que solo es cuestión de ser tenaz y no dejarle hacer lo que quiera siempre.
