Viajar en tren por Australia es la opción para los que no quieren conducir un automóvil o no depender de un autobús. Para los que quieran contemplar los paisajes y las ciudades, tanto del litoral e interior australiano, el tren es la opción perfecta.
Los precios son bastante económicos, con los de las tarifas promocionales aéreas, el único detalle al que hay que prestar atención son los horarios, ya que algunos trayectos se realizan durante la noche, y no sería la mejor hora para contemplar el paisaje.
La gran parte de las compañías tienen pases por un número de días, y son económicas para los turistas internacionales. Muchos de estos pasajes, permiten además las turas regionales.
Se diferencian tres rutas en tren principales: Countrylink, Great Southern Railway y Traveltrain.
Con los servicios de trenes urbanos podrás visitar las principales ciudades de Australia como Sídney, Adelaida, Brisbane, Melbourne y Perth. Además, la capital australiana también cuenta con metro, por su lado, Melbourne y Adelaida cuentan con trams y trenes.
Habitualmente todos estos servicios de transportes pueden adquirirse de varias formas: pases de una jornada, una semana, un mest, etc., incluyéndose la conexión con autobuses urbanos, barcas, metros o ferry boat.
Estas combinaciones, son una alternativa estupenda, para los que no tengan un vehículo y a la vez ahorrar en el caso de adquirir pases. Generalmente son rápidos en los horarios, confortables, limpios, seguros y confortables.
Al llegar a cualquiera de las ciudades australianas, la primera cosa que debes hacer en el mismo aeropuerto es dirigirte al puesto de información turística y pedir un folleto con el listado de horarios de los autobuses, ferrys, trams u otro medio de transporte público local. Este tipo de folletos son gratuitos y te facilitarán tu planificación.
¿Has viajado en tren por Australia? Cuéntanos tu experiencia.