Mama, comprame un perro¡¡¡¡, seguro que más de una ha oído esta frase, muchas nos negamos rotundamente, porque sabemos que al final la responsabilidad de cuidarles y sacarles de paseo va a recaer sobre nosotras, pero habrá alguna que sí decidirá cumplir ese deseo, porque tener un perro puede tener muchos beneficios.
Por eso hay que pensar cuidadosamente antes de comprarlo en muchos aspectos:
Comprar y mantener un perro cuesta dinero, así que lo primero es mirar nuestro bolsillo, porque a parte del desembolso inicial en la compra, después hay que mantenerlo, cuanto más grande, más come y en gasto veterinario, necesita vacunas y cuidados, por lo menos dos visitas veterinarias al año, es un ser vivo, no un juguete que se arrincona cuando se aburren, te puedes ahorrar la compra si lo adoptas, no es necesario tener un perro con pedigree.
Tu casa: mira las dimensiones, un perro pequeño necesita menos espacio que uno grande.
¿Has pensado cuando vas a sacarle de paseo? un perro necesita hacer sus necesidades y ejercicio, no es bueno que esté todo el dia solo, analiza vuestros horarios y quien y como lo vais a sacar de paseo, dependiendo de la raza unos necesitan más ejercicio que otros.
No lo cojas con menos de dos meses de edad, ya se que son muy monos tan pequeñitos pero esos dos meses con su madre son necesarios para que el cachorro se críe con la leche de su madre que le aporta defensas para su sistema inmunitario que le protegerá durante toa su vida.
Asegurate de comprobar que vacunas tiene ya, si es adoptado comprobar su historia anterior, para ver si está sano y equilibrado, si te decides por un perro con una historia difícil detrás procura darle después los cuidados necesarios.