Cada vez son más las personas que compran a través de la web, y es que además de que es muy cómodo comprar desde casa, en muchos casos, este tipo de compras también suponen un importante ahorro… Sin embargo, a los compradores nos gusta probar y asegurarnos de que aquello que compramos se adapta a nuestras necesidades, que es de nuestra talla, que el color es el que buscamos, y un largo ecétera de cosas a tener en cuenta en cualquier compra.
En un futuro, nunca se sabe, pero en la actualidad no es posible probar los productos que se compran en Internet, ¿entonces? Como prueban y comparan los usuarios aquello que compran? Con lo que se conoce como Showrooming.
El showrooming es lo que siempre se ha identificado con la frase «solo estoy mirando» o lo que es lo mismo, entrar en una tienda solo para mirar, sin tener que comprar, pero en este caso la idea no es solo no comprar o comprar solo si se ve algo que vale la pena, sino asegurarse de la adecuación de un producto, para después comprarlo más barato en Internet.
Podría parecer un hábito normal y que no hace mal a nadie, sin embargo, en algunos países los negocios han empezado a notar considerables pérdidas debido a las compras masivas en Internet y a que son muchas las personas que prueban sus productos, pero cada vez menos las que compran, por este motivo, en algunas tiendas ya se ha implantado una norma por la que frases como «solo estoy mirando» dejan de ser gratis y cuestan hasta 5 euros.
Sería díficil, pensar, al menos de momento, que en España se llegara a cobrar el ir de tienda, en parte porque muchas veces la famosa frase se usa como excusa para comprar sin tener a un dependiente continuamente detrás, y en parte porque las bajas ventas de las últimas temporadas podrían ser aun menos si para entrar en una tienda hubiera que pagar, se comprase o no.
¿Qué te parece tener que pagar por mirar en una tienda? ¿Alguna vez has practicado Showrooming?