El verano es una de esas épocas en las que nos dejamos llevar por los placeres y nos relajamos… Descuidamos un poco la dieta en pro de esas terracitas y los chiringuitos, somos menos rigurosos con el ejercicio físico, etc. Y después del verano, adpatarnos de nuevo a las rutinas no es fácil y cuesta adptarse. Pero, ¡ojo!, otra época de excesos está a la vuelta de la esquina, así que lo mejor será ponernos serios y comenzar a recuperar la forma para que no se nos vaya de las manos…
Recupera la dieta sana
Recupera la dieta sana y equilibrada y restringe de manera radical cualquier tipo de excesos. Elimina todos esos alimentos que te suman kilos en pro de otros que te ayuden a mantener o recuperar la línea.
Pon fin al sedentarismo
Es hora de comenzar a moverse de nuevo y añadir actividad al día a día. Sustituye el coche por un paseo para ir al trabajo, no pierdas oportunidad de subir y bajar por las escaleras, etc. Tu rutina será más llevadera y tu cuperpo te lo agradecerá.
De vuelta al gimnasio
Andar un ratito por la smañanas ayuda, pero no es ejercicio físico suficiente. Vuelve al gimnasio y establece una rutina semanal de ejercicios. Y, sobre todo, conciénciate y ponte como reto que se trata de una rutina ineludible.
Saca partido a las nuevas tecnologías
Ahora existen, por ejemplo, muchas apps de entrenamiento que motivan y ayudan a conocer los resultados, establecerte retos en cuanto a tu ejercicio, etc. Y la tecnología también ha permitido que tengamos a nuestro alcance complementos que nos ayudan a lograr mejores resultados (zapatillas y prendas que ayudan a tonificar, etc.).
Alíate con la cosmética
Las cremas reafirmantes o anticelulíticas, no son milagrosas, pero sí pueden ser un buen complemento. Reserva 10 minutos al día para mimarte aplicando este tipo de cosmética. Junto al ejercicio físico y una dieta sana, te ayudará a lograr mejores resultados.